La Facultad de Ciencias de la Información ha acogido el encuentro "Periodismo por Mujeres", organizado por estudiantes de cuarto curso de Periodismo miembros del programa La Cueva de Inforadio, en colaboración con el Instituto de Investigaciones Feministas de la UCM, la asignatura de Género de la Facultad y el colectivo Letras Feministas. La jornada ha contado con la presencia de las periodistas Magda Bandera, Montse Domínguez, Cristina Fallarás, Ana Pardo de Vera y Nuria Varela.
Entre las profesionales participantes en el encuentro se reunieron cuatro directoras de medios, algo que sigue siendo todavía excepcional como recordó la decana de Ciencias de la Información, Carmen Pérez de Armiñán. De acuerdo con sus datos, "de los 221 periódicos que hay en España, sólo 20 están dirigidos por mujeres, y de los 15 más importantes de papel, sólo uno, La Nueva España, cuenta con una directora".
Eso es así a pesar de que los estudios de comunicación cada vez cuentan con más mujeres matriculadas, hoy en día más del 60%, un crecimiento exponencial desde el "28% de la primera promoción del año 1971".
De todos modos, la decana ve que la tendencia está cambiando, y como muestra está la composición de la junta directiva de ATIC (Asociación de Universidades con Titulaciones de Información y Comunicación), ya que de sus siete miembros seis son mujeres "porque son decanas de otras tantas facultades de comunicación en España".
Cristina Fallarás, directora de Diario 16, considera que en realidad esos datos positivos son sólo reflejo de "una pequeña elite blanca en el mundo". Según Fallarás "los medios, cuando hablan de las mujeres, hablan de esa pequeña elite que ha mejorado su vida", porque en realidad con la aparición de la globalización "se da un fenómeno que no había ocurrido jamás, que es que somos un producto industrial, y millones de mujeres son víctimas de la trata".
De acuerdo con la periodista, en general las mujeres hoy en día viven peor de lo que han vivido jamás y hay casos de esclavitud en "todos los burdeles que tenemos debajo de nuestra casa", así que no hay que dejarse llevar por la autosatisfacción.
Magda Bandera, directora de La Marea, reconoce que en su medio de comunicación las cuatro principales figuras que rodean a la dirección son mujeres, pero eso sólo ha sido posible porque son una cooperativa que pueden hacer lo que quieren y no tienen que depender de grandes capitales externos.
La directora de Público, Ana Pardo de Vera, asegura que "hay gente que cree que estás ahí por ser mujer, para llamar la atención y ser noticia". Sin embargo, ella llegó al cargo por cumplir con una serie de requisitos y por estar ahí en el momento oportuno, "pero lo de ser mujer se dejó al margen". A pesar de eso, sí reivindica el serlo y formar parte de ese "11% de mujeres en los puestos de dirección de los medios de nuestro país".
Considera Pardo de Vera que todavía "hay machismo de todo tipo y ser mujer y dirigir un medio es muy complicado, porque los ataques se recrudecen, aunque también es un reto".
En este mundo donde el poder económico "es masculino y lo controla todo", el objetivo pasa por romper ese techo de cristal y por estar en los consejos de administración para "ser dueñas de los medios y poder tomar las decisiones reales".
Montse Domínguez, la directora de la edición española de El Huffington Post, coincide en señalar la "endogamia masculina" que existe en esos consejos, aunque considera que se ha empezado a romper ese techo.
Señala Domínguez que entre los medios de comunicación, los menos machistas son los medios on line, "no por el formato, sino por la época, que es diferente". De todos modos, considera que el machismo, dentro del periodismo, no es como el que se vive en otras empresas, porque "siempre ha sido un oasis dentro de un mundo laboral muy hostil para las mujeres".
Recordó la periodista que a lo largo de su carrera jamás ha estado en una redacción netamente masculinizada, sino que siempre ha compartido trabajo con otras mujeres. Una experiencia diferente a la de Nuria Varela, actual directora de la editorial Hotel Papel. Cuando ella comenzó su carrera como reportera de guerra, ya tuvo que enfrentarse al machismo "no sólo por ir a cubrir un conflicto, sino por el mero hecho de ser mujer, por la estructura patriarcal que te pone una mirada diferente y te juzga para ver si puedes hacer un tema o no".
Todas ellas reconocieron que el camino por recorrer es muy largo y que hay que contar con el riesgo del retroceso si no se afianzan los logros. Como señaló Montse Domínguez, "siempre hay peligro de una marcha atrás en los avances, como ha ocurrido en Estados Unidos con la elección de Trump".