El 30 de noviembre por la tarde la Facultad de Medicina ha acogido la entrega de los Premios Proyecta Igualdad 2017, convocados por la Unidad de Igualdad de la UCM. En esta segunda edición se han entregado tres galardones y tres accésit a proyectos que se llevarán a cabo en el campus para conseguir que la Complutense sea una universidad más igualitaria, e incluso alguno de ellos, como aseguró María Bustelo, delegada del rector para Igualdad de Género, ya se han empezado a implementar. Tras la entrega de premios, los asistentes disfrutaron de una charla, impartida por Yolanda Domínguez, sobre el poder que tienen las imágenes (cine, publicidad, arte, videojuegos...) para proyectar la idea de la igualdad o de la desigualdad.

El primer premio de esta edición ha sido para el trabajo "Te has olvidado de", por fomentar el reconocimiento y visibilidad de autoras en el ámbito académico. El proyecto consiste en crear fichas que marcarán los libros de las bibliotecas realizados por mujeres y la posibilidad de mover ese conocimiento por las redes sociales. Las cinco ganadoras se repartirán también un cheque de 450 euros para gastar en libros sobre feminismo y género.

El segundo galardón lleva por título "Protocolo para la prevención, detección y actuación ante situaciones de acoso sexual, acoso por razón de sexo (sexista) y acoso por orientación sexual e identidad y expresión de género de la UCM". María Bustelo asegura que es un importante trabajo porque "revisa el protocolo que ya existe en la actualidad desde un punto de vista intereseccional racial". Las dos ganadoras recibieron un cheque de 250 euros para libros.

"Jornadas de Igualdad UCM " es el nombre del tercer proyecto ganador, por plantear una propuesta para sensibilizar a toda la comunidad universitaria por parte del propio estudiantado, en grupos mixtos, en todos los centros de la UCM. En este caso, las cuatro ganadoras se repartirán un cheque de 150 euros.

Los tres accésit han sido para "La generoteca", que implica fomentar la perspectiva de género en todas las bibliotecas de la UCM y crear un espacio para el feminismo en la universidad; "Empodérate", una acción formativa para el empoderamiento de las mujeres; y un proyecto de revisión y actualización del programa de evaluación Docentia-UCM desde una perspectiva de género.

El rector Carlos Andradas aseguró que "conseguir una universidad más igualitaria es nuestra gran preocupación" y que para lograrlo hacen falta "cambios estructurales que perduren en el tiempo" como pueden ser los que surjan de estos premios. Opinó el rector que los cambios pasan por una "intolerancia total hacia determinadas conductas y por crear una cultura de qué es lo que pretendemos con la guía contra el acoso, el protocolo contra el acoso y talleres como Igualdad de género y construcción de nuevos modelos sociales de mujeres y hombres", coordinado por Mónica Saiz Martínez.

De acuerdo con Andradas, hay que trabajar mucho en las vivencias y los roles que se nos asignan desde la infancia. Precisamente en torno a esos roles, impuestos por las imágenes, versó la conferencia de la artista visual y experta en comunicación y género, Yolanda Domínguez.

El poder de las imágenes
Contó la conferenciante que de sus recuerdos de la infancia, sólo le quedan imágenes de hombres, o chicos, que hacían cosas, y de mujeres, o niñas que seguían las normas o que, "como Candy Candy, simplemente lloraban y sufrían".

Considera Domínguez que esa imagen de la mujer sumisa se ha trasladado hoy en día a las series de televisión, a las películas, "donde son sólo chicas monas o rescatadas por los hombres", y a la publicidad. La única diferencia, según la artista, es que ahora "hay más violencia y sexo explícito, hay una cultura pornográfica bastante extendida".

Ahí están campañas publicitarias como las de Miu Miu, con niñas que parecen estar en un prostíbulo, o muchas otras en las que las mujeres aparecen tumbadas, sin fuerza, o directamente como objetos sobre los que se ha ejercido violencia.

Opina la artista que "en las escuelas nos enseñan a leer textos, pero no imágenes, aunque hoy en día forman parte de nuestra educación casi más que los textos". Según ella, "las imágenes son una herramienta de persuasión mucho más eficaz que los textos y pueden generar cambios en las personas que las ven". Y eso no es un invento nuevo, sino que ya se utilizan en tiempos de los egipcios y de los romanos.

Yolanda Domínguez analiza incluso una obra clásica como La venus de Urbino, de Tiziano, desde un punto de vista muy original. Para ella en el cuadro aparece la mujer del propio conde de Urbino en tres manifestaciones al mismo tiempo, como mujer desnuda para "recordar los deberes maritales"; como perro, "para recordar la fidelidad" y como cuidadora de una chica más joven, para resaltar "la maternidad".

Al final, lo que difunden todos esas imágenes es un estereotipo, que las mujeres son "cuerpos disponibles, casi como objetos, muchas veces como trozos de carne sin rostro".

Domínguez mostró algunas de sus acciones como "Accesibles y accesorias", "Poses" o "I`m not just a body" con las que pretende llamar la atención sobre esta cosificación de la mujer, sobre esos estereotipos de "mujer blanca, joven y delgada". Una de sus acciones más exitosas, con participación en toda España se llama "Registros" y fue motivada por el proyecto de ley que quería presentar el PP para limitar el aborto. En "Registros" las mujeres fueron a los registros de la propiedad para registrar sus propios cuerpos.

Tiene claro Domínguez que la solución pasa por "denunciar, por comunicarse con las marcas" y, sobre todo por una educación que enseñe a "ver, filtrar y utilizar imágenes".