Hasta el 31 de enero se puede visitar, en la sala de exposiciones de la Facultad de Bellas Artes, la muestra colectiva El modelo como reflexión. Homenaje a Aveni Falceto de Mur. Esta exposición nació con el objeto de "reivindicar y valorar la presencia del modelo en las asignaturas y clases de la Facultad de Bellas Artes desde cualquier línea de trabajo o técnica artística, teniendo el modelo como punto de partida y reflexión". Al mismo tiempo, y de acuerdo con el comisario Óscar Alvariño, la muestra es "la oportunidad de homenajear a la modelo Aveni Falceto coincidiendo con su jubilación como reconocimiento a su dedicación en el trabajo, pasión por nuestra facultad y calidad humana".
Óscar Alvariño, profesor del Departamento de Escultura, es un apasionado de la relación del artista con la modelo, de hecho reconoce sentirse "fascinado por la liturgia del modelo, desde los primeros encuentros hasta las sesiones incansables de trabajo en el taller".
En el texto que ha escrito para el catálogo de esta muestra afirma que "la tensión en el ritual es necesaria para que el acto creativo surja emancipado del modelo y a la vez no sea un esclavo descriptor del natural". Añade Alvariño que "es una especie de comunicación secreta, un momento sutil que consigue que la escultura vibre y resuene con la vida del modelo, es precisamente ahí donde se rompe el tiempo y aparecen otras coordenadas que dotan de sentido al discurso formal". Justo ahí es donde el modelo "crece y se transforma en la tarima con una explosión de forma, adquiere un tamaño mucho mayor y muta".
Y eso es lo que se puede ver precisamente en el trabajo de 42 artistas que mirando a Aveni Falceto de Mur ofrecen una visión totalmente diferente, e incluso divergente de la modelo.
El propio Alvariño cuenta con varias esculturas en la muestra de diferentes materiales y más o menos realistas, en las que "todo gira sobre un eje que es su columna vertebral y se va dibujando sobre la tierra, como se dibuja una caricia sobre la misma arena".
En el óleo de Paloma Pélaez Bravo descubrimos a una Aveni Falceto de espaldas en la que la modelo "es metáfora, pensamiento, plástica, es parte de una forma esencial del arte: la nuestra".
También está la modelo en carbón sobre papel, en las obras de Joaquín Millán, que explica que su "preocupación por obtener un buen trabajo en el taller de modelo con Aveni Falceto tratando de equilibrar torpezas y aciertos", le devuelven a una "agradable y conocida tensión", porque una cosa es "el dibujo en sí" y otra distinta "el acto de dibujar".
Aveni también es reconocible en los bocetos de Francisco Gómez Jarrillo, que considera que "valorar el trabajo de los modelos y agradecer su buen hacer es nuestra obligación".
Los trabajos en resina de poliuretano también muestran a una Aveni que mira retadora al visitante, porque como afirma la artista Esther Gómez "el modelo es consciente de la mirada del espectador". Por eso le interesa que "mire directamente al objetivo, atravesando la barrera, sin sonreír, sin conectar con ningún gesto".
Los artistas de la muestra miran también más allá de Aveni, como en los bellos óleos de Irene Cuadrado, las esculturas inquietantes de Rodrigo Romero, las formas retorcidas de Tomás Bañuelos, el aire cubista de David Lechuga, el minimalismo de Pablo de Arriba o el clasicismo de José Carralero.
El resto de artistas de la muestra son Felipe Alonso, Luis Alonso, Ignacio Asenjo, Eduardo Alvarado, Elena Blanch, Fausto Blázquez, José M. Bouzas, Sonia Cabello, Juan M. Castrillón, Víctor Chacón, Juan Antonio Chamorro, Miguel Coronado, Jesús Crespo, Frédérique Edy, Javier Fernández, Juan Gil Segovia, Teresa Guerrero, Yi Ten Lai, Pedro Lozano, Carlos Moles, Pedro Martínez Sierra, Javier Martínez, Ana Olano, Guillermo Oyágüez, Hermanos Pardo, Carmen Pérez, Cayetano Portellano, Alberto de Santos, Pedro Terrón, Soraya Triana y Lucio Zurdo.