La producción agrícola intensiva produce enormes cantidades de residuos. Por ejemplo, en Costa de Marfil se desechan anualmente 4 millones de toneladas de cáscaras de cacao; en Ghana, 300.000 toneladas de cáscaras de coco. El estudiante complutense Javier de Pablo Martín ha visto en esta problemática una oportunidad. Su proyecto consiste en reciclar cáscaras de cacao y coco para producir lápices y muebles. De esta forma resuelva dos problemas: disminuiría la contaminación ambiental que producen las cáscaras y reduciría la deforestación que cada año provoca precisamente la demanda de madera para fabricar lápices y muebles. Su proyecto se llama "Caocus" y es el ganador en la modalidad de proyectos de los I Premios Emprendedor Social UCM-Santander.
El acto de entrega de esta primera edición de los Premios Emprendedor Social UCM-Santander se celebró el pasado 8 de octubre en la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales. Como explicó Gustavo Lejarriaga, director de la Cátedra de Emprendimiento Social UCM-Santander, organizadora de los Premios, se presentaron 38 candidaturas a las tres modalidades convocadas, Proyectos, Ideas y Trabajos de Fin de Grado (TFG). "Lo que a mi entender ha sido algo magnífico y que en buena parte hay que agradecer a la difusión que se hizo desde la oficina Compluemprende", subrayó Lejarriaga en un acto al que junto asistieron la vicerrectora de Transferencia del Conocimiento y Emprendimiento, Mercedes Gómez; la decana de Económicas y Empresariales, Begoña García Greciano; la directora general de Santander Universidades y Universia España, Susana García Espinel, y la directora de la Oficina Complutense del Emprendedor, Compluemprende, Paloma Bel.
La Universidad Complutense, como recordaron tanto la vicerrectora como la decana, realiza desde hace unos años una decidida apuesta por el emprendimiento. De hecho, es una de las pocas universidades que cuenta con un Vicerrectorado específico, que creó el rector Andradas tras tomar posesión en 2015, y una oficina, Compluemprende, que ya funcionaba desde unos años antes, y que aglutina numerosas iniciativas y programas para fomentar y apoyar el emprendimiento no solo entre los estudiantes, sino incluso entre profesores y personal de la universidad. Como subrayó Susana García Espinel, esta apuesta de la UCM por el emprendimiento ha encajado a la perfección con el trabajo que en este campo desarrolla también desde hace unos años Banco Santander. De acuerdo con la directora general de Santander Universidades y Universia España, es el emprendimiento surgido en las universidades el que mejores aportaciones hace a la sociedad, ya que en él confluyen rasgos diferenciadores como son la aptitud, las necesarias competencias, la capacidad de aprendizaje, y también la ilusión o la motivación. "Ramón y Cajal decía que las ideas no duran mucho, que hay que hacer algo con ellas cuanto antes. Cien años después esa necesidad de actuar es aún más acuciante, y la universidad es el entorno ideal para llevarlo a cabo", concluyó García Espinel, a la vez que animaba a todos los que han presentado sus candidaturas a los premios a continuar con sus proyectos, aprender de sus errores y a no tener miedo al fracaso, "porque equivocarse no es fracasar, sino un aprendizaje".
Junto a Javier de Pablo Martín y su proyecto "Caocus" (en los enlaces se ven los vídeos en los que los propios premiados resumen sus proyectos), en la modalidad de "Proyectos" también fue premiado el denominado "Co-Crea-Kult", promovido por Shandra Martínez Caballero, Irene González Lara, Virginia Fernández Gabriel y Clara Álvarez de Eulate. Su propuesta es una aplicación web y para dispositivos móviles que conecta y visibiliza artistas, creadores, agentes culturales y profesionales del sector, ofreciéndoles dos servicios: mediadores facilitadores de trabajo, colaboración, espacios y materiales, y asesoría jurídica. En esta misma modalidad el jurado concedió dos accésit. El primero a "Brainguard", proyecto presentado por Josué Pagán Ortiz, José Luis Ayala Rodrigo, José Luis Risco Martín y Ana Beatriz Gago, quienes han desarrollado una aplicación para predecir las migrañas con suficiente antelación para permitir a los pacientes que anticipen su medicación y eviten así los efectos. El segundo "accesit" es para "Deltar", una propuesta de Rodrigo Rojas Cruz y Joselyne Milagros Ríos Riquelme, que trata de mejorar la gestión de los residuos que ocasionan fiestas y botellones.
En la modalidad "Ideas emprendedoras" se concedieron tres premios: "Danza para el Parkinson en tu ciudad", promovido por César Casares Parra, Concepción Mora Araujo, Paula Guzmán y Paloma Alfonsel; "Clear fog", promovido por Marta Martín Mazaira, y "Violencia de género", propuesto por Gabriel Sotos Santos, Daniel de la Iglesia González y Alma Baxter Pedrosa. También se concedió un accésit a "Modelo de atención temprana integral en el ámbito hospitalario", presentado por María Alonso Fernández, Nuria Galán González y Alodia Martínez Marín.
Por último, en la modalidad de "Trabajos de Fin de Grado (TFG)" resultaron premiados: Manuel Velázquez Martínez por "Lonja on line"; Paula Bublay Mena por Selfless, y Sergio Rodríguez Valcarce por Pack&Go. Borja González Yanuas y su Smooth&Healthy fue reconocido con un accésit.
LA UNIVERSIDAD Y EL EMPRENDIMIENTO SOCIAL Juan Juliá Igual, rector de la Universidad Politécnica de Valencia de 2005 a 2013 y en la actualidad vicepresidente adjunto de la CRUE, pronunció previo a la entrega de premios una conferencia sobre "Universidad, emprendimiento y economía social". La intención de Juliá, como él mismo explicó, fue ir lanzando una serie de ideas y reflexiones, sobre estos tres ámbitos y otros relacionados. La primeras reflexiones fueron sobre economía en general: los países que mejor soportaron la crisis y más fuertes están ahora son "las que hacen uso del conocimiento en su economía". Incluso en la propia España, según indicó Juliá, fue la comunidad autónoma que más invierte en I+D, el País Vasco, la que menos recortes tuvo que hacer llegar a su población. Otra idea sobre economía, aunque esta no es suya, sino del Nobel Joseph Stiglitz: el origen de la crisis hay que buscarlo en la pérdida de valores de la economía. A esta Juliá volvió después.
Sobre la universidad, varias ideas. La primera, que la Universidad no puede olvidar su compromiso con la sociedad de tratar de dar respuestas a las propias demandas de la sociedad. Otra: a la sociedad no le preocupa la formación de las elites, sino de la gente. Otra más: hasta 19 universidades españolas figuran entre las mejores 500 del mundo en los diferentes rankings internacionales; en Europa tan solo Reino Unido y Alemania pueden presumir de tener más. Por supuesto, y sobre ello hay que reflexionar, hay cosas que las universidades tienen que mejorar. Entre ellas la transferencia del conocimiento; es necesario incentivarlo más entre los docentes, y el emprendimiento. En esto último las universidades cada vez están poniendo más ahínco, pero aún queda por hacer. En cantidad, por supuesto, pero también en calidad. El emprendimiento que nace de la universidad, según subraya Juliá -quien en la actualidad preside la Red Española Interuniversitaria de Institutos y Centros de Investigación en Economía Social, RedEunies- "es el que más interesa a la sociedad": el es más innovador, el que mayor uso hace de tecnología avanzada, el que más visión internacional tiene, el que menos microempresas genera...
Recuerda Juliá, para terminar, que a este emprendimiento salido de las universidades, que se caracteriza por su inteligencia, hay que añadirle otra pata, y es aquí donde vuelve a Stiglitz: "valores". Vincularlo a la denominada "economía social" es una buena respuesta, cómo no va a serlo un emprendimiento en el que prevalece la incidencia social sobre el ánimo de beneficio económicos de sus socios. Sin embargo, al "estar de moda" hay que tener cuidado "y hacerlo bien. Lo primero -y así concluyó Juliá su conferencia- es definir bien el perímetro; dejar claro lo que es y lo que no es el emprendimiento social. La universidad aquí también tiene que contribuir". |
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