Del 5 al 18 de noviembre se celebra la XVIII Semana de la Ciencia, bajo el lema "¡Engánchate a la Ciencia!". Este evento europeo de divulgación científica, que se realiza anualmente desde 2001 en universidades y centros de investigación, está coordinado en la Complutense por el Área de Cultura Científica de la OTRI-UCM, que en este 2018 ha recibido más de 250 propuestas, repartidas por prácticamente todos los centros de nuestra Universidad, tanto dentro como fuera del campus. El objetivo, un año más, es que se camine por donde se camine, uno no puede dejar de estar rodeado de ciencia, y además que esa ciencia a la que tenga acceso sea divertida y de aplicación inmediata. ¿Qué hay más emocionante que ver cómo un producto químico interacciona instantáneamente? ¿Qué hay más divertido que escaparse de una escape room al tiempo que se aprende sobre evolución? ¿Qué mejor manera de introducirse en la cirugía que con un videojuego? ¿Qué hay más intrigante que saber si existe vida extraterrestre?
Como un simple ejemplo de las muchas actividades de esta Semana de la Ciencia, y dando un breve paseo en la mañana del lunes, pasamos por una escape room paleontológica, una exposición sobre cristales en esa misma Facultad de Geológicas, una conferencia-espectáculo de magia sobre matemáticas, un sinfín de divertidos talleres de Química Analítica y la observación en tiempo real de los múltiples rayos cósmicos que nos atraviesan.
Los estudiantes del máster de Paleontología, animados por su profesorado, han diseñado una didáctica y divertida actividad con "acertijos de lógica e ingenio a los que se suma el conocimiento que se les aporta sobre paleontología, biología y evolución". Los estudiantes se embarcan en una máquina del tiempo que les lleva a diferentes eras geológicas, comenzando por el Paleozoico, cuando se originó la vida sobre nuestro planeta.
Allí los estudiantes les hablan, entre otras muchas cosas, de LUCA, esa primera célula de la que derivamos todos los seres vivos, de la explosión cámbrica donde surgen todos los reinos que conocemos actualmente y de la extinción que acabó con el 95% de la vida existente y que dio paso al Mesozoico. Un momento en el que los estudiantes deben pasar a una escape room y de allí escapar con todo lo aprendido. Que no ha sido poco.
Todos aquellos que pasen por Geológicas podrán disfrutar además de la muestra "El arte y la ciencia de los cristales", una bella exposición de los proyectos premiados en el Concurso de Cristalización en la Escuela (CCE). Las piezas que se pueden ver han sido elegidas por "su valor didáctico, científico, originalidad y calidad de los cristales". Junto a esas maravillas de la naturaleza se pueden ver una serie de pósters premiados en la fase nacional del CCE de este 2018.
Mientras tanto, en la Facultad de Matemáticas, estudiantes de los institutos Ramiro de Maeztu y Victoria Kent, llenan la sala Miguel de Guzmán para disfrutar de una sesión de los, ya clásicos en la Semana de la Ciencia, Nelo y Álvaro, dos de los miembros de Divermates. En este caso su conferencia ha tratado sobre "Burbujas en tensión", y en ella han explicado de manera muy práctica que el jabón es elástico, minimiza el espacio y se adapta a las superficies para adoptar todo tipo de formas.
En el edificio de al lado, en Químicas, en concreto en el Departamento de Química Analítica, los alumnos del Francisco de Ayala disfrutan con alguna de las muchas actividades que han puesto a su disposición, desde convertir el cobre en plata, utilizando un compuesto de mercurio; hasta la fabricación de una masa viscosa tipo blandiblub con alcohol, colorante y un polimerizante. Sin dejar de lado, por ejemplo, crear tintas invisibles, aprender la cromatografía de los colores del boli o fabricar una lluvia de oro.
Junto a las escaleras de la Facultad de Físicas nos encontramos con otra clásica de la Semana de la Ciencia, la cámara de chispas, es decir, un detector de partículas que permite captar los rayos cósmicos en tiempo real tan "sólo" utilizando un gas nobel, un campo eléctrico muy intenso y la presencia de partículas con carga eléctrica.
Todas estas iniciativas demuestran que hay muchas maneras de aprender, y que no hace falta aburrirse para hacerlo, sobre todo cuando hablamos de ciencia, una de las actividades más divertidas a las que puede enfrentarse nuestro cerebro, sobre todo cuando se nos ofrecen los conocimientos de una manera tan didáctica como en esta Semana de la Ciencia.
La experiencia es, además, totalmente inmersiva, porque de Químicas se puede pasar a la Biblioteca Histórica, Veterinaria, Medicina, Estadística, Físicas, Bellas Artes, Políticas y Sociología, Educación, Filología, Geografía e Historia, Matemáticas, Trabajo Social, Geológicas, Filosofía, Biología, Biblioteca María Zambrano, Comercio y Turismo, Yacimiento de Somosaguas, Farmacia, Instituto de Estudios Biofuncionales, Instituto Pluridisciplinar, Psicología, Jardín Botánico, C Arte C, Ciencias de la Información, Edificio de Estudiantes, Hospital clínico veterinario, VISAVET, Informática, Centro Nacional de Microscopía Electrónica, Clínica universitaria de Psicología... Y, por si eso fuera poco, la UCM también organiza salidas fuera del campus, tanto paseos por la ciudad de Madrid como actividades en algunos lugares emblemáticos como AECID, Museo Arqueológico Nacional, Casa de la Moneda, Museo Nacional de Antropología, Iglesia de San Antonio de los Alemanes, Madrid Río, Junta Municipal del Distrito de Chamberí, Museo del Prado, Centro Cultural Santa Petronila, Museo Municipal de Madrid, Centro Cultural Conde Duque, Caso do Brasil, Escuela de Teatro La Lavandería, Café Abonavida...
Con esta presencia masiva se garantiza que nadie quede al margen de esta ciencia que engancha.
