El día 25 de marzo, de 18 a 20 horas se ha celebrado la primera edición del Primavera at Home Festival, promovida desde el grado en Musicología, de la Facultad de Geografía e Historia. Han sido en total diez actuaciones de estudiantes, emitidas a través de Instagram, en las que se han podido escuchar instrumentos como el piano, la guitarra, el saxofón, la trompeta y, por supuesto, la voz. Entre el repertorio, una total heterogeneidad, ya que, como afirma Julio Arce, director del Departamento de Musicología, "para este Festival no se ha fijado ningún criterio, así que tocan desde Chopin, o música para guitarra clásica, hasta composiciones propias e incluso versiones para canciones de Disney o piezas creadas para películas de cine mudo, así que como se puede ver, y escuchar, es un programa realmente variado".

Julio Arce cuenta que en el grado de Musicología cada año entran unos setenta estudiantes, así que "entre los cursos de máster, grado y doctorado hay un número importante de alumnos que tienen, al menos la mayor parte de ellos, conocimientos musicales prácticos, porque en un alto porcentaje vienen de escuelas de música y conservatorios". Prácticamente todos tocan algún instrumento, tienen grupos y además cada uno con su propio estilo, desde instrumentistas clásicos, que son la mayoría, hasta los que tocan instrumentos diferentes, hacen canción de autor, crean sus propias composiciones...

Con ese bagaje, los profesores de Musicología pensaron "hacer una actividad para todos los demás, para colaborar en algo en estos momentos, y aunque desde este Departamento no se puede ayudar desde un punto de vista médico, técnico o asistencial contra el coronavirus", consideraron que podían ofrecer algo de cultura, "entretener a la gente y además crear un espacio para juntarnos, porque esa es la idea, compartir el periodo de aislamiento, crear esa idea de comunidad, y saber que hay alguien que te está escuchando". Así surgió la idea de montar este Primavera at Home Festival, de música on line, haciendo un llamamiento a todos los alumnos, escribiéndoles y proponiéndoles que interpretaran desde sus casas y que lo transmitieran por Instagram.

Lo que no se ha podido hacer es que todos emitiesen desde el mismo canal, así que cada uno lo ha hecho desde su cuenta personal. Para facilitar el seguimiento del programa, en el perfil de Instagram de Musicología (@musicologiaucm), se han colgado los perfiles de todos los músicos, así que no ha hecho falta más que ir haciendo click en cada uno de los intérpretes, donde se indicaba su perfil y la hora a la que iban a actuar.

El festival

Arce explica que en esta ocasión no ha habido ningún tipo de filtro, ni de selección en los artistas, sino que se eligió a los primeros que se apuntaron, que fueron muchos más de los que han actuado finalmente, porque en un solo día, desde que se abrió la inscripción, se llenó el programa, "así que es posible que en breve haya una segunda edición". Cada uno de los elegidos ha tenido diez minutos de interpretación, dentro de un programa de dos horas de música en directo.

Antonio Olea (@antonio.olea), a la guitarra, interpretó, de manera sobria, temas de Joseph Kosma, Jorge Cardoso, Jaime Zenamon y Antonio Lauro, antes de mandar "un abrazo para todos".

Marina Lujua Bellido (@marinalujua), ha cantado con su padre Jorge Lujua Urquijo, acompañándole al piano, With a little help from my friends, de The Beatles y Je vole, de Michel Sardou.

Al saxofón, Miguel Ángel Gil Redondo (@miki749) ofreció un mashup, una especie de collage sobre una base musical, de temas conocidos de saxo, Tras ello dio las gracias a todos, "en especial a la Complutense por esta maravillosa iniciativa", y nos deseó una "feliz cuarentena".

Un fragmento del primer movimiento del Concierto para Trompeta, de J. N. Hummel fue la pieza elegida por Carlos Castellanos (@Carlos_jee) para este Festival, utilizando una base rítmica de piano de acompañamiento. Después de su concierto, pidió perdón por los fallos, perdonables (si es que los hubo) porque lleva "ocho años sin subirse a un escenario".

Luis Enrique Zapata (@kike_xii) interpretó al piano el tango Por una cabeza, de Carlos Gardel y otro compuesto por él mismo, en una original retransmisión en la que sólo le vieron las manos pulsando las teclas. Como anécdota, comentar que al utilizar la cámara frontal del móvil para la emisión, el piano aparecía invertido, lo que llamó la atención de un buen número de melónamos entre los espectadores del Festival.

Diego Roldán (@elpoetaylamusa) cantó, con la guitarra y una base musical, tres temas propios: Si el tiempo cambia, Tiempo y Perdóname, confiando en que nos gustasen "de corazón".

Al piano también, Jorge Gil Zulueta (@el_pianista_de_cine) recreó un medley con sus propias piezas para tres clásicos del cine mudo, como son Nosferatu, El gabinete del Dr. Caligari y Los cuatro jinetes del Apocalipsis. Su propuesta musical la hizo desde el rincón donde compone esas "píldoras, esas pequeñas piezas musicales para acompañar en directo a este tipo de películas".

Laura de la Rubia (@ldelar_23), acompañada con su voz y una guitarra, interpretó tres canciones, en homenaje a grandes voces femeninas del jazz, Ella Fitzgerald, Nina Simone, Etta James, y una última, en castellano, de la banda sonora de Tiana y el sapo.

José Sánchez Valero (@justcallmemusic), también con su guitarra, hizo una versión de Pan y mantequilla, de Efecto Pasillo, esperando que "nos haya amenizado la tarde, que estemos todos bien y que hayamos disfrutado todos los directos".

Cerró el Festival Juan Monsalve Ledesma (@juan.monsaledes) con dos versiones de canciones de Mumford & Sons que le "acompañan en esta cuarentena". La primera de ellas fue Awake up my soul y la segunda sobre un hombre que tiene miedo, incertidumbre sobre lo que va a venir, pero encuentra una esperanza en ese miedo. Después de su concierto, confío en que "estos días que nos quedan de cuarentena no se pierdan y que sean de provecho". 

La última de las actuaciones terminó justo a las 20 horas, para que todos pudiésemos salir a los balcones o ventanas a aplaudir a todos los profesionales que nos hacen la vida posible, entre los que quizás habría que incluir a estos músicos que nos han llegado de alegría durante dos horas.