Antonio Fraguas de Pablo, Forges, fue el invitado de la primera sesión del año del ciclo "la maestría es un grado", celebrada el 17 de enero, festividad de los burros.
Su consejo es aplicar el humor en todas las situaciones de la vida. Dice que él lo hace y que, además de para ganarse la vida, le sirve para quitar transcendencia a todo lo menos bueno que le depara su día a día. Para seguir su consejo recomienda empezar a reirse de uno mismo cada día, no mirarse al espejo por la mañanas sino asomarse a ver que te encuentras. Una vez conseguido eso llega el momento de escudriñar la realidad, de fijarse en lo cotidiano, de diseccionarlo, de, como decía el filósofo hindú Rabindranath Tagore, fijarse en dónde tienen los cuernos las vacas, "algo en lo que muy poca gente se fija". "El humor -continuó el humorista- hay que utilizarlo siempre, en todo momento, hasta cuando vas a impartir una conferencia y te recuerdan que hoy es la festividad de los burros. Además -concluyó Forges, a punto de cumplir 70 años- está demostrado científicamente que el humor mejora la salud al segregar serotonina el cerebro, por lo que no hay más que hablar".
Aunque la intervención de Forges en el ciclo "La maestría es un grado" llevaba por título "Iconografía de la España Contemporánea", lo cierto es que no fue mucho el tiempo que el humorista dedicó a esta cuestión. Si acaso dejó un par de ideas. La primera es que una "s" al final de la palabra "España" nos habría evitado muchos disgustos. La segunda, centrífuga tendencia que caracteriza a los españoles y que solo nos permite estar de acuerdo cuando la situación llega a un extremo horroroso, pero que en periodos de tranquilidad es de todo modo imposible. Este hecho se resume, a juicio de Forges, en una frase única en el mundo, una frase que solo es capaz de pronunciar un ciudadano español, una frase que no tiene traducción en ninguna otra lengua que no sea propia de nuestro país. "Es una frase que es punto filosófico de convergencia mental de los españoles. La frase es: "No, si ya verás tú cómo...". Solo un español puede utilizar esta frase. Jamás se la escucharás a un inglés, un francés o un alemán, ni siquiera a un italiano, que no deja de ser un español con marketing. Es la frase que explica ese caracter nuestro centífugo, pero que a la vez nos une, seamos de la España que seamos".
Con la propiedad intelectual no hay bromas
Aunque lo explique buscando la sonrisa de quien le está escuchando, lo cierto es que durante su charla en Geografía e Historia el único punto en el que Forges no pareció estar para bromas fue en su defensa de la propiedad intelectual. "No entiendo como puede haber gente que reclame la abolición de los derechos de autor. Que digan eso de que los productos artísticos o intelectuales deben ser para todos de manera gratuita. ¿Y dónde queda nuestro trabajo, dónde se nos reconoce, de qué vivimos los artistas? Cuando escucho esto, yo les contesto que de acuerdo, que les regalo mis dibujos, pero que lo voy a hacer a cambio de que me concedan el derecho percebal, es decir, el derecho a comer percebes sin pagarlos siempre que me apetezca".