El clúster de Agroalimentación y Salud del Campus de Excelencia Internacional Moncloa consolida la colaboración entre la Facultad de Veterinaria de la UCM, la Escuela de Agrónomos de la UPM, y el INIA (Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria).

El Campus Moncloa de Excelencia Internacional divide su actividad investigadora en seis clústeres. El de Agroalimentación y Salud está coordinado por Lucas Domínguez Rodríguez, catedrático del Departamento de Sanidad Animal de la Facultad de Veterinaria de la Complutense y director del VISAVET (Centro de Vigilancia Sanitaria Veterinaria), y por Margarita Ruiz Altisent, catedrática de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Agrónomos de la Politécnica de Madrid.

Los dos coinciden en señalar una serie de ventajas de este clúster que consolida una relación que ya existía entre las universidades Complutense y Politécnica (a través de Agrónomos y de la Escuela Universitaria de Ingeniería Técnica Agrícola) y otros centros como el INIA . Domínguez y Ruiz resaltan que es un clúster que tiene una base territorial importante, ya que están juntos físicamente. Eso permitirá poner en marcha la iniciativa más ambiciosa de la colaboración, la bautizada como Soto2020, en la que también participa el clúster de Patrimonio.

Este proyecto quiere crear un área de excelencia investigadora en un amplio corredor ubicado en la Vega del Manzanares que va desde la Escuela de Agrónomos hasta las instalaciones de Veterinaria. Como un primer paso simbólico, ya se ha abierto la valla que limita ambas universidades para que se puede acceder a los campos de prácticas de la UPM. El objetivo de este entorno es generar nuevas oportunidades tanto para la investigación como para la docencia en los campos de agroalimentación y salud, así como crear un área atractiva para la inversión pública y privada.

El clúster cuenta, ahora mismo, con unos setenta grupos de investigación. Hasta la fecha se han invertido unos 600.000 euros en la mejora de infraestructuras de la UCM y la UPM. Dinero que ha ido esencialmente para instalaciones de animales y para el estudio urbanístico del proyecto Soto2020. Además se ha ayudado, con 800.000 euros, al equipamiento científico de alto nivel y uso común para tres proyectos en los que están involucrados catorce grupos del clúster.

Una de las tareas más complejas es la puesta en común de proyectos interuniversitarios. Margarita Ruiz y Lucas Domínguez reconocen que las sesiones en las que se juntan los investigadores de ambas universidades son muy importantes para conocer las líneas de trabajo de cada uno y ver cómo se puede colaborar y crear sinergias que enriquezcan la investigación de cada uno. "No es fácil, pero es muy interesante y enriquecedor".
La colaboración entre la UCM y la UPM no se va a reflejar solo en investigación. Además se quieren crear grupos que acudan a obtener fondos de manera conjunta en proyectos europeos, e impartir docencia entre las dos universidades. Ya está en marcha un máster en Producción y Sanidad Animal, que se espera que comience el próximo curso.

Los dos coordinadores del clúster tienen grandes esperanzas, ya que se ha puesto "a trabajar de manera coordinada a dos de las universidades más importantes del mundo".